Tips de relajación en consultorio médico
Las visitas al doctor son un foco de estrés para muchas personas. En cuanto ponen un pie en el consultorio médico, sus nervios se disparan y pueden aparecer efectos físicos como una sudoración excesiva, molestias abdominales y hasta mareos. Por suerte, esta fobia se puede llegar a superar si aplicamos una serie de consejos para conseguir la relajación.
Acudir acompañado al consultorio médico
Pocas veces ocurre que el paciente pase a consulta nada más llegar. Lo normal es que tenga que pasar algo de tiempo en la sala de espera y, cuanto más se alarga el momento de ver al médico, más se incrementa el nivel de nervios. De ahí que una buena manera de lidiar con este problema sea acudir acompañado.
Ir con un amigo o un familiar es una buena forma de distraerse y no ponerse a pensar en cómo será la consulta con el especialista, o en las pruebas que se van a realizar.
Hacer ejercicios de respiración
La forma en que respiramos influye mucho en que nos notemos más nerviosos o más calmados. Cuando estamos agitados tenemos tendencia a respirar de forma más incontrolada, inspirando y espirando rápidamente, lo cual acelera todavía más nuestro organismo a todos los niveles.
Por el contrario, cuando mantenemos un ritmo de respiración pausado, los efectos calmantes son prácticamente inmediatos. Por eso, una buena forma de sobreponerse a los nervios en el consultorio médico es trabajar la respiración. Basta con coger aire despacio por la nariz contando mentalmente hasta 10, retener el aire en los pulmones contando de nuevo hasta 10, y expulsar el aire de nuevo por la nariz contando lentamente hasta 10.
Unas cuantas repeticiones de este ejercicio son suficientes para obtener buenos resultados. Y lo mejor es que es una práctica de relajación que se puede llevar a cabo en cualquier sitio, incluso sin que los demás se den cuenta.
Pensar en opciones de recompensa
Cuando a los niños les da miedo ir al médico, solemos ofrecerles una pequeña recompensa si se portan bien. Si funciona con los peques, también lo hace con los adultos.
Mientras estás en la sala de espera piensa en cómo vas a recompensarte a ti mismo por estar afrontando bien una situación que te genera estrés. Por ejemplo, al salir del consultorio médico puedes parar en tu cafetería favorita, o pedir algo de cenar en el restaurante que más te gusta.
¿Qué se puede hacer desde el consultorio médico para ayudar a los pacientes a relajarse?
El propio centro sanitario también puede poner de su parte para que los pacientes se sientan lo más cómodos y relajados posible en ese entorno.
Una de las claves para conseguir este objetivo es acertar con la decoración. Crear un ambiente que incite a la tranquilidad, con colores bien elegidos. Por ejemplo, en lugar del rojo, que sabemos que suele alterar el estado de ánimo, podemos escoger el azul, que contribuye a la calma.
Por lo que respecta a la sala de espera, aunque esta debe transmitir la imagen de marca del centro clínico, se puede decorar la misma de forma que el paciente se olvide un poco de dónde está. En lugar de ser un lugar aséptico, puede ser un entorno muy confortable, con butacas cómodas, bien climatizado y una iluminación adecuada.
Para que aquellos pacientes que acuden solos no estén dándole vueltas a la cabeza, no está de más contar con algo de lectura en la sala. Todavía mejor si se usa una música ambiental que, sin ser demasiado relajante, ayude a mantener los nervios bajo control.
Un consultorio médico puede convertirse en un lugar apacible y agradable, incluso para quienes tienen fobia a ir al doctor. Una buena elección de la decoración es de vital importancia para transmitir buenas sensaciones. ¿Necesitas ayuda para decorar tu clínica? Estamos aquí para ayudarte.
Si te ha gustado esta publicación de «Tips de relajación en un consultorio médico» también podría gustarte «Espacios en centros médicos«
Comentarios recientes